Lourdes Treviño firma el interiorismo del nuevo restaurante Iztac
La descubrimos en 2017, año en el que la arquitecta Lourdes Treviño Quirós, junto a su equipo de FreeHand, se estrenó en Casa Decor con el agradable y acogedor home office «La Favorita 2.0». El espacio estaba presidido por una librería de hierro y madera, con chimenea de vapor integrada, que le valió una «Mención del Jurado al Mejor Diseño Original» en los V Premios Casa Decor.
En la última edición, Treviño también estuvo presente de la mano de Bang & Olufsen, que escogió a la arquitecta para diseñar el espacio «Shape», una divertida sala de juegos en la cual destacaba una maravillosa barra de acero con botellero colgante, diseñado por FreeHand.
Pero además de sus participaciones en Casa Decor, la arquitecta está inmersa en múltiples proyectos. Hoy, presentamos uno de sus últimos trabajos: el restaurante Iztac, en Madrid.
El local
Ubicado en la Plaza de República de Ecuador, Iztac abre sus puertas en el mismo espacio en el que en 1959 se inauguró «Mexico Lindo», continuando así con el linaje, cultura y tradición del que fuera el primer restaurante mexicano de Madrid.
La propuesta, diseñada por el chef mexicano Nacho Oropeza, transporta al comensal a los sabores más auténticos de esta gastronomía usando los ingredientes que esta cocina ofrece y que hacen de cada bocado algo sorprendente. La carta recorre desde el noreste en baja California hasta el sureste en Quintana Roo. Un total de 32 nacionalidades por las que hacer un recorrido en Iztac.
El interiorismo
El proyecto, firmado por Lourdes Treviño Quirós, se planteó el reto de transformar totalmente el antiguo local para crear un espacio único organizado en diferentes ambientes y con una impactante zona de bar.
Como hilo conductor, los lienzos realizados expresamente para este restaurante por el pintor Gabriel Moreno y que narran la leyenda de Iztaccíhuatl y Popocatépetl, una historia de amor al estilo de Romero y Julieta, pero ambientada en el esplendor del Imperio Azteca.
Decoración contemporánea
Frente a la cocina tradicional que se puede degustar en Iztac, para su decoración Lourdes apostó por un estilo moderno y vanguardista que se aleja por completo de los típicos restaurantes mexicanos.
Gracias a una base en tonos neutros se logró un espacio luminoso y elegante, si bien se animó con pinceladas de color que aportan un necesario toque de calidez y contribuyen a crear ambientes acogedores el los que sentirse como en casa.
La barra
El restaurante esta organizado en varios ambientes: un amplio salón, un espacio con biblioteca, una cocina abierta que da al cliente una prueba visual de que lo que está a punto de degustar se hace en el momento, un jardín mexicano repleto de plantas y una zona de barra, ubicada en la entrada, donde llama la atención el original techo de cervezas Coronita.
Las bebidas
Al igual que sus ingredientes y sus platos, las bebidas de Iztac representan la cultura gastronómica mexicana en todo su esplendor. Una elaborada propuesta de coctelería, repleta de autenticidad en la que no pueden faltar las micheladas, una excelente selección de mezcales, y uno de los grandes clásicos de la cultura mexicana: las margaritas.
