Cortinas y estores: ideas y tendencias para vestir las ventanas
Cortinas y los estores son imprescindibles en la decoración de interiores, ya que son capaces de renovar el ‘look’ de un ambiente con su sola presencia. No sólo refuerzan el estilo decorativo de una estancia o intervienen en su luminosidad, sino que también dan un toque de color, elegancia o contraste en las estancias.
La elección no es fácil, hay que tener en cuenta el estilo decorativo del resto de elementos de la habitación, pero también la cantidad de luz e intimidad que queramos conseguir. Por suerte, en Casa Decor contamos con una pléyade de fantásticos profesionales que, en sus proyectos, nos han dado las pautas a seguir para sacarles el mayor partido decorativo y funcional posible. Así los vieron ellos y así te los presentamos. ¡Toma nota!
Cortinas con faldones
Una cortina con faldón queda mucho más elegante, tiene más caída y añade prestancia a los espacios. En cuanto a colores, son tendencia las cortinas bicolor, que mezclan dos tonos, ya sea sólo en la parte de abajo, como en todo el perímetro de la cortina. Esta es una opción muy sofisticada y elegante, siempre y cuando se elijan buenas combinaciones.
En la zona de estar «Dandy Lounge» con techos altos, Raúl Martins decidió vestir las ventanas con unas amplias caídas apoyadas en el suelo. Se trata de la colección Nexo en su versión en gris, primer diseño original del arquitecto de interiores para KA International, con un amplio faldón en blanco que permitía el paso de la luz, sin renunciar a la claridad ni a la intimidad.
Para vestir las ventanas de la biblioteca «Tengo un libro sostenible», Marta Labrador eligió unas elegantes y suntuosas cortinas con faldón de KA International. La decoradora recurrió a la colección Tánger by Tomás Alía, un terciopelo de pelo largo y dibujos abstractos, rematado con un faldón bajo en negro, que crean piezas elegantes y con una personalidad que derrocha técnica y diseño.
Las decoradoras de AS Interiorista eligieron dos tejidos de Gastón y Daniela para la confección de las cortinas: la tela Bronte Azul, un visillo realizado en lino con tramas de lana de la colección Lorenzo Castillo Volumen V, que van rematadas con un faldón en terciopelo de algodón Venecia Plomo de la colección «Gastón y Daniela».
Cortinas en capas
Una manera fácil de controlar los niveles de luz en una habitación o en una zona de paso consiste en colocar varias cortinas a la vez, en capas. Una cortina transparente o en blanco, mantendrá la habitación bien iluminada, pero a la vez creará una luz difusa. Combinada con otras cortinas en una tela algo más tupida, podrá reducir los niveles de luminosidad cuando sea necesario.
En tonos tierra y blanco, así se colgaron las cortinas en la suite Zanzíbar del hotel Maisons du Monde & Suites, espacio ideado por el equipo de Maisons du Monde.
En la antesala del espacio Agua, diseñado por el estudio SINMAS para la firma Laufen, se combinaron cortinas tupidas en tono verde agua a juego con otras semitransparentes con dibujos geométricos, ambos modelos de Jannelli & Volpi.
Los tejidos opacos no dejan pasar la luz ni el calor. Proporcionan una oscuridad total, incluso a plena luz del día. Este tipo de cortinas son ideales para habitaciones en las que se quiera ocultar cualquier hueco, como sucedía en el recibidor «L’Entrée« diseñado por Fabián Ñíguez. Una fascinante propuesta para las cortinas con los textiles Folie de la colección Gentry, de la firma Lizzo/Pepe Peñalver.
Cortinas semitransparentes
A veces una sutil barrera es todo lo que se necesita para controlar la luz que entra por las ventanas sin perder luminosidad y conseguir un aspecto totalmente diferente en una habitación.
En el espacio «Alta Pintura», diseñado por Culdesac para la firma Valentine, se recurrió a dos cortinas de textil en formato de lamas verticales, un modelo que permite un preciso control de la luz. Con un solo accionamiento se regulan las lamas en función de la orientación del sol, para un máximo confort visual y térmico.
En la zona dedicada a foros y conferencia del AC Loungue de Casa Decor, las puertas acristaladas se cubrieron con finos bastidores donde se fijaron varios triángulos confeccionados con tejido semitransparente de KA Internacional. ¡Más sencillo, imposible!
Para tamizar la luz que entraba por las ventanas del recibidor «Abstracción natural», Clara R-Spiteri eligió una cortina enrollable con cajón Q-Style, confeccionada con un tejido elaborado con algodón 100% reciclado; y la cortina enrollable Fit-Box, una cortina con cajón decorativo y guías laterales de líneas rectas, que se integra en todo tipo de puertas y ventanas sin necesidad de hacer agujeros ni usar tornillos. Ambos modelos de tejidos
Estores de todos los estilos
En salones y en dormitorios con un toque romántico y relajante, la utilización de estores fomenta la naturalidad y hace más acogedoras estas estancias. En función del estilo, puedes elegirlos sin varillas; plegables, un clásico en decoraciones más clásicas; o enrollables, la opción más ligera y actual.
En cuanto a los tejidos, los estores el algodón o el lino, tienen mucha aceptación en la decoración de interiores, sin olvidar, una nueva generación de tejidos que aportan un plus de glamour y elegancia a los estores y, en consecuencia, a las habitaciones con tejidos que imitan rafia, arpillera o seda, entre otros.
La ventaja de los estores es que dejan espacio bajo la ventana para colocar muebles como escritorios, cómodas, sillas… Como sucedía en el dormitorio creado por Mónica Garrido para la firma francesa La Redoute, donde se habilitó una acogedora zona de relax, donde se colocó un estor enrollable que daba intimidad y, al mismo, tiempo dejaba al descubierto una colchoneta y unos mullidos cojines.
Cortinas y estores, una combinación infalible
Otra de las tendencias es la de mezclar diferentes elementos y tipos de texturas. Por ejemplo, la combinación de cortina y estor puede resultar ideal en algunas estancias como el salón o el dormitorio. Una mezcla que fusiona con elegancia la rigidez del estor y la fluidez de la cortina.
En la zona de estar del espacio «Less is more», proyectado por Disak Studio para Hager Sistemas, los grandes ventanales se vistieron con cortinas venecianas, de Bandalux, ideales para orientar la luz solar y mantener la privacidad. Ambas esquinas se remataron con elegantes caídas de tela en tonos neutros, que añaden prestancia a las cortinas enrollables.
De la misma firma, para decorar las puertas acristaladas del dormitorio de su suite «La chambre enchantres», Fran Cassinello eligió una combinación de estor enrollable y unas cortinas tradicionales, fabricadas con tejidos naturales.
Cortinas como telón de fondo
Aunque su misión principal es la de matizar la luz, aportar intimidad y realzar el estilo de nuestras ventanas, la cortinas sirven para mucho más. Pueden dividir habitaciones, ocultar zonas de almacenaje o servir de telón de fondo.
En el restaurante «The Art of Living Frigicoll», diseñado por Tristán Domecq, para dar intimidad al comedor privado, además de para decorar las ventanas, se eligieron unas suntuosas cortinas en tono anaranjado de agradable caída y colocada como un gran telón escénico, de Gancedo.
En perfecta sintonía con el resto de la decoración, una gran cortina semicircular daba calidez y elegancia a la zona de la bañera en los aseos de uso público «La baronesa con pincel», espacio proyectado por Virginia Sánchez para Bathco.
Para el sofisticado baño «Brave Sea» decorado por BAO Proyectos, se pensó en una amplia cortina blanca con faldón negro a modo de telón de fondo para enmarcar la zona de lavabos y tocador. ¡Pura sofisticación!
Fotos: Luis Hevia y Nacho Uribesalazar para Casa Decor.